tipos de piercings
Piercing facial (oreja, nariz y ceja)
- Oreja. El lóbulo de la oreja es la zona tradicional de perforación y es la parte del cuerpo donde el piercing resulta menos agresivo. Si se realiza en el cartílago, el resultado cambia. Estudios recientes aseguran que la perforación en el cartílago es más arriesgada por la mayor tendencia a infectarse, especialmente si se hace con pistola.
-Nariz. Es una zona que puede infectarse fácilmente por la humedad a la que está sometida. Además puede provocar problemas en el cartílago.
- Ceja. En la ceja sólo se recomienda la perforación lateral porque en el centro hay nervios y vasos sanguíneos que se pueden dañar y perjudicar el conducto lacrimal. Del mismo modo, puede provocar una inflamación que afecte el folículo piloso y haga caerse el vello de la zona.
Las perforaciones en el lóbulo de la oreja tardan en cicatrizar de 6 a 8 semanas y en el cartílago 4 semanas a un año. Para la aleta nasal son necesarios de 2 a 4 semanas y para la ceja, de 6 a 8 semanas.
Durante este tiempo, son necesarios unos cuidados especiales. Se aconseja lavarlos de 2 ó 3 veces al día con jabón antibacteriano y un poco de agua tibia y moverlos suavemente. Enjuagar bien el jabón y secar con una toalla limpia o con un poco de papel.
Piercing oral (lengua y labio)
Es uno de los más agresivos y delicados porque en la boca se concentra gran número de bacterias que pueden provocar infección en la mandíbula y a toda la boca, alteraciones del gusto, sangrado durante la primera semana, halitosis o hipersalivación.
Además puede originar problemas bucodentales. Un piercing en la lengua golpea los dientes y puede provocar factura y desgaste de esmalte. También afecta a las encías. En el peor de los casos, el piercing puede quedar enterrado y habrá que intervenir quirúrgicamente.
El tiempo de cicatrización del piercing en la lengua es de 4 semanas y el del labio de 2 a 3 meses. Cuando se hace una perforación en esta zona, los especialistas aconsejan evitar tomar alcohol, masticar chicle, fumar, las comidas picantes, el sexo oral.
Los cuidados básicos consisten en lavar bien los dientes y enjuagar la boca con colutorio desinfectante después de cada comida. También se debe cepillar suavemente el piercing para que no se acumule comida alrededor. De este modo se pueden evitar infecciones.
Piercing corporal (ombligo y pezón)
Tanto el ombligo como el pezón son zonas delicadas para la aplicación de piercing. La curación suele durar entre 6 y 8 semanas, durante los cuales se debe llevar una higiene adecuada con un gel neutro para prevenir infecciones. No utilizar maquillaje ni cremas durante la cicatrización y vestir con ropa cómoda para no irritar la herida.
Piercing genital
En esta zona los riesgos principales son infecciones, disminución de la sensibilidad y hemorragias, en el caso del pene. Para su cicatrización son necesarias de 4 a 6 semanas, y algunos profundos de 3 a 6 meses. Se debe limpiar el piercing 2 ó 3 veces al día durante su cicatrización con un gel íntimo y enjuagarse bien. Los piercing deben limpiarse antes de tener relaciones sexuales hasta que termine la curación, también es aconsejable utilizar preservativo. Los espermicidas y lubricantes pueden causar irritaciones. Se debe evitar el contacto oral.
Piercing microdermal: una alternativa interesante
El piercing microdermal es un piercing que se implanta dentro de la piel y queda dentro de nuestro cuerpo. Básicamente este tipo de piercings consiste en introducir un piercing dentro de nuestra piel, dejando en la superficie la punta saliente de este piercing. Por lo tanto, nuestro cuerpo cicatriza con el metal dentro, dejando solo un extremo a la vista.
Esta forma de piercing no es tan dolorosa como parece, pero requiere de un cuidado mucho más minucioso que el piercing normal, ya que el riesgo de infección es mayor. Comparado con otros tipos de implantes, podemos decir que este no es ni tan riesgoso ni tan invasivo.